Es realmente algo molesto.
Es una sensación de vacío, de hueco, de algo que pide a gritos llenarse y no hay forma, no hay con que. Un grito desesperado de ayuda, de exigir y suplicar al mismo tiempo un camino, un sendero que nos de esa seguridad que tanto buscamos, que anhelamos. Necesitamos saber que dirección tomar, hacia donde mirar. Predestinar nuestro futuro para comenzar a pisar con fuerza. Sentirnos con la fortaleza de decir : "acá estoy! Mirame, puedo verte desde aquí"
Es complicado y duro, más lo es cuando caemos en la realidad de que nadie vendrá a comunicarnos cuál camino es el adecuado, para dondear dirigir nuestra mirada. Debemos buscarla nosotros mismos, ser protagonistas de nuestra propia historia, lograr encontrar esa vida que tanto anhelamos. Sentirnos fuertes, llenos, libres. Sentir que tenemos capacidades infinitas posadas sobre nuestras manos. Necesitamos fe y sabiduría para transitar ese camino, para no tropezar y, en caso de hacerlo, saber reintegrarse. En desgracia de caernos saber levantarnos, saber tener el objetivo en mente. Luchar contra todo tipo de obstáculos que quieran arrebatar nuestros sueños. Vencer. Ser nosotros mismos, felicitarnos por ello. Alcanzar, suspirar, sonreír, contemplar.. Allí está, esto es lo que buscábamos, lo que deseábamos desde lo profundo del alma, por esto luchamos. Hemos llegado. Hemos vencido.
Es una sensación de vacío, de hueco, de algo que pide a gritos llenarse y no hay forma, no hay con que. Un grito desesperado de ayuda, de exigir y suplicar al mismo tiempo un camino, un sendero que nos de esa seguridad que tanto buscamos, que anhelamos. Necesitamos saber que dirección tomar, hacia donde mirar. Predestinar nuestro futuro para comenzar a pisar con fuerza. Sentirnos con la fortaleza de decir : "acá estoy! Mirame, puedo verte desde aquí"
Es complicado y duro, más lo es cuando caemos en la realidad de que nadie vendrá a comunicarnos cuál camino es el adecuado, para dondear dirigir nuestra mirada. Debemos buscarla nosotros mismos, ser protagonistas de nuestra propia historia, lograr encontrar esa vida que tanto anhelamos. Sentirnos fuertes, llenos, libres. Sentir que tenemos capacidades infinitas posadas sobre nuestras manos. Necesitamos fe y sabiduría para transitar ese camino, para no tropezar y, en caso de hacerlo, saber reintegrarse. En desgracia de caernos saber levantarnos, saber tener el objetivo en mente. Luchar contra todo tipo de obstáculos que quieran arrebatar nuestros sueños. Vencer. Ser nosotros mismos, felicitarnos por ello. Alcanzar, suspirar, sonreír, contemplar.. Allí está, esto es lo que buscábamos, lo que deseábamos desde lo profundo del alma, por esto luchamos. Hemos llegado. Hemos vencido.
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